En la contraportada del álbum “Consider the birds” hay una cara. Una cara que asoma desde la oscuridad y a la que algo en las alturas parece inquietarla. Ceño fruncido, duda quizás. Señoras y señores, acaban ustedes de conocer a mister David Eugene Edwards.
Año 1992, tras el paso por diversas formaciones a caballo entre Los Angeles y la definitiva Denver, nuestro protagonista junto con Pascal Humbert fundan la tremenda banda 16 horsepower a los que posteriormente se les incorporará Jean-Yves Tolà y Jeffrey-Paul Norlander (viejo compañero de David en bandas embrionarias). Comienza así el camino de una banda desde la que se pretende aunar el gusto por la tradicionalidad sureña con la parafernalia gótica.
Año 1992, tras el paso por diversas formaciones a caballo entre Los Angeles y la definitiva Denver, nuestro protagonista junto con Pascal Humbert fundan la tremenda banda 16 horsepower a los que posteriormente se les incorporará Jean-Yves Tolà y Jeffrey-Paul Norlander (viejo compañero de David en bandas embrionarias). Comienza así el camino de una banda desde la que se pretende aunar el gusto por la tradicionalidad sureña con la parafernalia gótica.
Año 1996, tras unas cuantas idas y venidas, el grupo se termina por consolidar y se pone en el mercado su primera referencia “Sackcloth 'N' Ashes”. Gracias al single “Black soul choir” parecen alcanzar una cierta notoriedad.
Tras mas de 10 años mostrando sus particular fusión deudora tanto de Jonhy Cash y Dylan como de Ian Curtis, el combo termina por separase en el año 2005. Por el camino, han quedado una serie de trabajos (“Low Estate”, “Secret South”, el directo “Hoarse” y ese pequeña obra maestra que es “Folklore”) en los que el lado tradicionalista acabo por tomar una mayor importancia en la música.
Poco antes de la disolución de los 16 horsepower, Eugene empieza a necesitar un nuevo vehículo en el que reflejar sus ideas, y es ahí cuando nace Woven Hand, con la filosofía típica de proyecto paralelo.
El punto de partida era bastante similar al de la banda madre, decantándose en esta ocasión quizás por unas instrumentaciones un tanto mas luminosas, en las que destacan las incursiones de unos gélidos pianos que dan un carácter mas hipnótico a la música.
Los dos trabajos aquí destacados son, bajo mi punto de vista, dos de los grandes trabajos de esta década; música para escuchar a oscuras, tranquilamente. Aullidos indios, montañas al atardecer, pianos desde el mas allá, religiosidad solemne (David tiene un abuelo predicador al que solía acompañar de pequeño), agua fría fluyendo por la aun mas fría roca, musgo.
Para mí, el nivel de ambos trabajos es bastante similar, aunque he de reconocer mi especial predilección por “Consider The Birds”, donde el nudo central trazado por los temas “Chest of Drawers” y “Oil On Panel” puede llegar a emocionar con esa fuerza solemne de la que tanto gusta nuestro amigo Eugene.
Con una producción un tanto más homogénea, “Mosaic” incide en la línea trazada por su predecesor y temazos oscuros de la talla de “Dirty Blue” o “Deerskin Doll” se alternan con piezas un tanto más luminosas del estilo de la instrumental “Bible And Bird”.
Recomendaría la lectura de la crónica de un concierto de estos Woven Hand en el Festival de Paredes de Coura, donde por causas que no recuerdo el grupo se vio beneficiado por un cambio de horarios y acabo tocando en el escenario principal, al atardecer de lo que parece un día oscuro. Música desconocida por el redactor, acaba totalmente entregado a la propuesta, de lo que a él le parece percibir como “american gothic metal”.
Lineas tangenciales, lineas paralelas: “Sin perdón”, “La noche del cazador”.
2 comentarios:
El 14 de diciembre Woven Hand nos espera!!
Claro tonta, y gracias a tí
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